Durante la primera guerra mundial, el esperma fue utilizado como tinta invisible.
El servicio de inteligencia británico descubrió que esta sustancia tenía excelentes propiedades usándolo como tinta invisible, pues no reaccionaba con vapor de yodo, método tradicional para detectarlo.
El problema fue evidente después, la famosa tinta era acumulada en botellas, y las cartas hedían cuando eran abiertas.[emoji51][emoji51]