Se me plantea esta cuestión porque el otro día se me olvidó cargar la batería por la noche, al despertar usé por primera vez la carga rápida de mi Samsung A55 y vi que me hizo una carga completa en poco más de una hora a pesar de tener teóricamente una velocidad de carga de solo 25W. Entonces me dio por mirar las velocidades de carga medidas por GSMArena y vi que el Samsung A55 les da solo 63 minutos para una carga completa, exactamente lo mismo que da el Nothing Phone (2a) con 45W y la misma capacidad de batería (5.000 mAh). Pero eso no es todo, y para que veáis que esto no va de marcas, resulta que el Samsung S24 Ultra también con 45W y 5.000 mAh les tardó 65 minutos. Y otro dato más: el Xiaomi 13T con su flamante carga de 67W y los mismos 5.000 mAh se queda en 51 minutos, es decir, solo 12 minutos menos teniendo casi el triple de vatios.
¿Qué explicación le veis a todo esto?
Por si sirve de pista, mi antiguo Samsung A52s con 25W y 4.500 mAh tardaba unos más normales 88 minutos, y como tengo un cable que me "chiva" los vatios de carga me fijé en que cargaba a una "velocidad de crucero" de 21W, mientras que el A55 me carga de forma sostenida a 25W reales llegando a ver máximos por encima de esa cifra. Vamos, que una cosa es la velocidad de carga que declara el fabricante y otra cosa es la realidad.
E insisto en que esto no va de marcas, ¿eh? Hay unos cuantos ejemplos más de smartphones que cargan bastante más lentos que otros a pesar de tener la misma velocidad de carga teórica y la misma capacidad de batería, o que incluso teniendo más velocidad teórica cargan más lentos.
Mi conclusión es que no hay que obsesionarse tanto con la hoja de especificaciones, lo importante es la experiencia de uso, que en muchas ocasiones no coincide del todo con lo que indican los fríos números.
¿Qué opináis?
Saludos